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Un euro puede salvarte la vida, te explicamos cómo

24 noviembre 2019

Nuestro vehículo cuenta con cuatro puntos de contacto con el asfalto, dos en el caso de las motos. El correcto funcionamiento y estado de estos será vital para garantizar la seguridad de nuestro automóvil.
Hay dos aspectos que debemos tener en cuenta si hablamos del mantenimiento de las ruedas. Por un lado está la presión, la cual deberá ser revisada antes de cada viaje y, por supuesto, con el cambio de estación. Por otro lado, tema central de este artículo, encontramos el dibujo.
La marca de neumáticos Continental ha realizado un estudio y ha concluido que dos de cada tres conductores no conocen cuál debe ser la profundidad correcta del dibujo de sus neumáticos. Si tú eres uno de ellos, a continuación te explicamos cómo puedes asegurarte de que tus ruedas están en estado óptimo.
La sección de Motor de elpais.com ha publicado un artículo que establece que “el funcionamiento ideal se produce entre los cuatro y ocho milímetros y, aunque la legislación apunta a un mínimo de 1,6 milímetros, los especialistas recomiendan no bajar en ningún caso de los dos milímetros, momento en el que los conductores deben plantearse su sustitución”.
Comprobación casera
¿Tienes 1€? Ya lo tienes todo.
Si queremos saber en el momento cuál es la urgencia de sustitución de nuestras ruedas solo vamos a necesitar una moneda de un euro. El método es muy sencillo.
Colocamos la moneda en posición vertical sobre la banda de rodadura (la parte central de la rueda, la que está más en contacto con la carretera). A continuación nos fijamos en el borde. Si la franja dorada de la moneda queda cubierta por la goma es buena señal, eso significa que la podemos seguir utilizando.
Es recomendable realizar esta comprobación cuando sabemos que nuestros neumáticos ya tienen un cierto recorrido y desgaste. Si la rueda circula sobre mojado a una velocidad de más de 90km/h con un dibujo inferior a 1,6 milímetros vamos a estar en serio peligro. El automóvil, en este estado, pierde el agarre a la carretera y, por tanto, el control.